* Instinto animal
Cuenta la leyenda que una vez una serpiente empezó a perseguir a una luciérnaga. Ésta huía rápido y con miedo de la feroz predadora, y la serpiente, al mismo tiempo, no desistía. Huyó un día y la serpiente la seguia; dos días y la seguía. Al tercer día, ya sin fuerzas, la luciérnaga paró y le dijo a la serpiente: - ¿Puedo hacerte tres preguntas? - No acostumbro a dar esta oportunidad a nadie, pero como te voy a devorar, puedes preguntar -respondió la serpiente- - ¿Pertenezco a tu cadena alimenticia? - No -dijo la serpiente- - ¿Yo te hice algun mal? - No -volvió a responder la serpiente-. - Entonces... ¿por qué quieres acabar conmigo? - Simplemente, porque no soporto verte brillar. |
0 comentarios:
Publicar un comentario