Te vi y no quise despertarte
Me he despertado en mitad de la noche. Te observo mientras duermes, a mi
lado, y no puedo evitar excitarme al reparar en tu cuerpo. Duerme tranquila
ángel, mientras mis demonios de lujuria me consumen en el baño.
Estoy en el cuarto de baño, frenético, revuelto, excitado. Me he despertado
en mitad de la noche, dormías y yo con mis ojos clavados en tu cuerpo, me he
martirizado. Me tientas a ser malo de pensamiento y obra.
Por eso me encuentro en el cuarto de baño. Sumido en la soledad y la
oscuridad, he rebajado mi pantalón y mi calzón, doliente de una erección que
hace mella en mi cuerpo, en mi mente llena de picardías. No he querido
despertarte, ¿he sido demasiado bueno contigo? ¿Deberia haberte despertado
solo para que vieras tu inocente obra? El tiempo hablara.
Estoy caliente. Mi piel se endurece bajo mi tacto, mientras con dedos
hábiles recorro mi miembro, recogiendolo dentro de mi mano, y aprieto.
Suavemente ejerzo la presión que necesito, cierro los ojos y te imagino aquí
a mi lado.
Quiero creer que escucho la puerta de nuestro dormitorio abrirse, que te
deslizas dentro del baño y me encuentras tal y como estoy. Esa imagen te
hace gracia y hasta yo mismo me río. Tus labios vocalizan palabras que
entiendo perfectamente, "idiota", mientras te acercas a mi y apoyas tus
manos sobre mis piernas.
Nuestros ojos se buscan y concilio contigo en dejarte hacer, apartando la
mano de mi miembro cuando apenas me das un golpe de aviso con la yema de tus
dedos. Sonríes atrevida, me tienes esperándote. ¿Sabes?, me muero de ganas
de que lo hagas. Mi mano se desliza arriba y abajo sobre mi miembro, he aquí
que es tu mano la que concibo haciéndolo, me seduces con el cariñoso
desplazamiento, con esta paja de gloria donde atisbo pensamientos impuros.
Te veo riéndote a medida que te agachas sobre mi, deslizando bajo tus
rodillas una de las muchas toallas que tenemos a mano, el suelo esta frío a
pesar del calor del verano. Plantas un beso sobre la cabeza de mi polla, me
miras y te devuelvo la mirada excitado, me gusta ver como la rodeas con tus
labios, transmitiéndome la calor de tu propio cuerpo, tragándotela
golosamente.
No hago acto de ocio y te agarro del cabello. No solo porque se que te
gusta, sino porque me encanta. Me transmite una sensación de autoridad y a
la par el dominio de ejercer cualquier castigo o presión si creo que no lo
estas haciendo bien. Sabes que me gusta sentir tu lengua lamiendo mi polla,
demasiado bien sabes como me pone cuando tus labios rodean mi glande y lo
haces objeto de tus caricias.
Mas mi imaginación es sucia y la noche solo trae aire caliente y pegajoso.
Quiero verte tragar, eso me la pone aun mas dura. Tragas y respiras, tragas
y respiras y en acorde al tirón de tus cabellos, tomas aire pues por unos
segundos la tienes completamente dentro creyendo que te ahogaras si no te
libero pronto. Lo se, soy un cabrón.
Un pícaro bastardo que se masturba en el baño, imaginandote a mis ordenes.
Abro los ojos solo para soltar tus cabellos. Sabes de sobra que por como
acontece el movimiento de mis manos ahora quiero otra cosa y sabes que no
esta bien hacerme esperar. Esta noche, ahora, ya, mientras mi respiración se
acelera.
Dandome la espalda me ofreces aquello que me ha traído aquí. Tus cremosas
nalgas a mis ojos, son un regalo sobre el que me pretendo. Tu pantalón, tus
mismas braguitas, son desplazadas hacia abajo con un tirón salvaje. Mis
manos ascienden de nuevo sobre tus muslos, tan raudos como bajaron. Atrás,
sobre tus tobillos, quedan olvidadas las prendas que me molestaban a la
vista.
Mis manos sobre tus nalgas, buscando el calor de tu cuerpo, tu hermosura.
Acaricio y aprieto, deslizo las yemas de mis dedos marcándote a fuego,
mientras te atraigo hacia mi. Uno y dos azotes te caen sin malicia, tres y
cuatro le siguen con una sonrisa, cinco, seis, siete y ocho, con un gemido
tuyo, nueve y diez, te alejas y te atraigo otra vez.
Tus nalgas están sonrosadas, cada azote a resonado con fuerza y ello nos
excita. Mientras se abre un calor por mis huevos y en mi vientre parece
nacer un picor suave, me veo deslizando mi mano entre tus piernas. Te abres
para mi, tan puta como te quiero ahora. Estas cachonda, generosa de fluidos
que empapan mis dedos apenas te rozo con ellos. Mi polla va dirigida y hacen
nacer un suspiro ahogado en tu garganta cuando apenas he rozado tus labios,
te estoy haciendo sentar sobre mi y lo notas, toda esta dureza es por ti y
mientras me abro paso cariñosamente por tu sexo, uno de tus pezones ha caído
presa en la red de mis dedos.
Te follo, es lo que quería. Dominar tu voluntad bajo la mía, clavartela con
brío y obligarte a moverte. Cada uno de tus gemidos, como música, no hacen
sino que quiera meterla con mas ganas. El aire falta en tus pulmones con
cada acometida, mientras mi propio aliento se entrecorta, imaginando como
desaparece mi miembro dentro de tu cuerpo, me acelero. Imaginando como te
arqueas, se dispara mi pulso, que desde hace unos minutos solo late en la
cabeza de mi miembro. Imaginando como te ahogo al apretar tu cuello, me
corro y con ello, sonrió, lascivo, exitado, caliente... feliz de haberme
despertado esta noche, viéndote.
ALTAS envía un mensaje a cosasdivertidas+subscribe@googlegroups.com
ALTA en PARIDAS mensaje en blanco a paridas-subscribe@yahoogroups.com
ALTA EN LAAMANTE (ZIPS/adultos) LaAmante-subscribe@yahoogroups.com
--
--
publicar mensaje paridasymas@googlegroups.com
anular la suscripción paridasymas+unsubscribe@googlegroups.com
---
Has recibido este mensaje porque estás suscrito al grupo "paridas" de Grupos de Google.
Para anular la suscripción a este grupo y dejar de recibir sus correos electrónicos, envía un correo electrónico a paridasymas+unsubscribe@googlegroups.com.
Para obtener más opciones, visita https://groups.google.com/groups/opt_out.
[paridasymas:1514] Te vi y no quise despertarte xxx relato
4:07 |
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario