* Los diez soles del cielo
En el principio, había diez soles, hijos de Di Jun, Emperador Chino de los Cielos Orientales y de Xi He, su esposa, diosa del sol. Vivían en una gigantesca morera regada por las aguas del Valle del Cielo -aguas que siempre estaban en estado de ebullición porque allí era en donde los soles tomaban sus baños-.
Todas las mañanas, se turnaban para iluminar el cielo, dejando a los demás descansando en un árbol. Un día, cansados de una vida tan ordenada, todos subieron al cielo y corrían de un lado para otro para divertirse. Al haberse muliplicado su intensidad, cp,émzarpm a abrasar la tierra pero cuando sus padres les dijeron que se protasen bien y que bajaran, no hicieron caso. Di Jun, envió a su arquero, Hou Yi, para que les diese una lección a sus hijos. Yi derribó con sus flechas anueve de los diez soles. Di Jun estaba desconsolado y despojó a Yi y asu esposa Chan E, de su inmortalidad, desterrándolos de los cielos.
Todas las mañanas, se turnaban para iluminar el cielo, dejando a los demás descansando en un árbol. Un día, cansados de una vida tan ordenada, todos subieron al cielo y corrían de un lado para otro para divertirse. Al haberse muliplicado su intensidad, cp,émzarpm a abrasar la tierra pero cuando sus padres les dijeron que se protasen bien y que bajaran, no hicieron caso. Di Jun, envió a su arquero, Hou Yi, para que les diese una lección a sus hijos. Yi derribó con sus flechas anueve de los diez soles. Di Jun estaba desconsolado y despojó a Yi y asu esposa Chan E, de su inmortalidad, desterrándolos de los cielos.
0 comentarios:
Publicar un comentario