* La niña que pisó una sepultura
Una noche,unos chicos celebraban una fiesta. En la misma calle, un poco más abajo, había un cementerio y estaban comentando el miedo que daba.
No se te ocurra nunca pisar sobre una tumba cuando se ha puesto el sol, dijo uno de los chicos. Si lo haces, el muerto te agarra y te mete dentro.
Mentira, replicó una de las chicas. Eso son supersticiones.
Un dólar a que no te atreves, apostó el chico.
A mí no me dan miedo las tumbas, respondió ella. Si quieres te lo demuestro ahora mismo.
El chico le tendió su navaja.
Clava esta navaja en una de las sepulturas le dijo. Así sabremos que has estado allí.
El cementerio estaba lleno de sombras y había un silencio sepulcral.
"No hay nada que temer",se repetía la chica,pero en el fondo estaba asustada.
Escogió una tumba y pisó sobre ella. Luego se agachó rápidamente,clavó en el suelo la navaja y se dispuso a marcharse. Pero no pudo.¡Algo la retenía!Lo intentó de nuevo,pero seguía sin poder moverse. Estaba aterrada.
¡Algo me retiene!gritó,y cayó al suelo.
Al ver que no regresaba, los chicos fueron en su busca. Encontraron su cuerpo tumbado sobre la sepultura. Sin darse cuenta, la niña se había enganchado la falda con la navaja al clavarla en el suelo. Era la navaja lo que la retenía. Había muerto de miedo.
No se te ocurra nunca pisar sobre una tumba cuando se ha puesto el sol, dijo uno de los chicos. Si lo haces, el muerto te agarra y te mete dentro.
Mentira, replicó una de las chicas. Eso son supersticiones.
Un dólar a que no te atreves, apostó el chico.
A mí no me dan miedo las tumbas, respondió ella. Si quieres te lo demuestro ahora mismo.
El chico le tendió su navaja.
Clava esta navaja en una de las sepulturas le dijo. Así sabremos que has estado allí.
El cementerio estaba lleno de sombras y había un silencio sepulcral.
"No hay nada que temer",se repetía la chica,pero en el fondo estaba asustada.
Escogió una tumba y pisó sobre ella. Luego se agachó rápidamente,clavó en el suelo la navaja y se dispuso a marcharse. Pero no pudo.¡Algo la retenía!Lo intentó de nuevo,pero seguía sin poder moverse. Estaba aterrada.
¡Algo me retiene!gritó,y cayó al suelo.
Al ver que no regresaba, los chicos fueron en su busca. Encontraron su cuerpo tumbado sobre la sepultura. Sin darse cuenta, la niña se había enganchado la falda con la navaja al clavarla en el suelo. Era la navaja lo que la retenía. Había muerto de miedo.
pathry
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